Para la gente que tiene una casa con jardín, una de las opciones para acondicionar las zonas exteriores es instalar un césped. Pero el césped requiere un cuidado. Es un organismo vivo, una planta, hierba. Debes regarlo a menudo, cortarlo para mantener una altura uniforme, limpiarlo de plantas invasoras. En fin, mucho trabajo. La alternativa más efectiva es poner césped artificial. Pero, ¿te vale la pena? En mi opinión, sí, y te voy a explicar por qué.
El césped artificial es una alfombra para exteriores fabricada con plástico. Simula la forma y la textura de un césped, pero requiere menos mantenimiento. Una de las características más interesantes del césped artificial es su versatilidad. Puedes instalarlo en cualquier zona exterior, no solo en el jardín. Se puede colocar sobre tierra, sobre terrazo o sobre cemento. Puedes cubrir con él el suelo de una terraza de un ático en la ciudad o las zonas exteriores de una casa. Imagínate que tienes una casa de pueblo de esas que hay por Andalucía, La Mancha y Extremadura. Con su magnífico patio, con el pozo en medio. Puedes cubrir el suelo del patio con césped artificial sin hacer ninguna obra. Cambias por completo la apariencia del lugar.
Una de las cuestiones que tira para atrás a mucha gente a la hora de instalar césped fabricado es su apariencia artificial. El blog de Briconeo, una tienda online de productos para el bricolaje, señala que los céspedes artificiales tienen un acabado cada vez más realista. Esto significa que tienen una apariencia similar al césped natural. Y ya no solo a la vista, también al tacto.
Y es que, como sucede con otras plantas artificiales, la tecnología se ha desarrollado tanto que en algunos casos resulta complicado diferenciar un césped natural de uno artificial.
Ventajas del césped artificial.
La revista de decoración A.D., que siempre ofrece interesantes propuestas para acondicionar nuestras casas, publica un artículo en el que expone las ventajas del césped artificial. Estos son los beneficios más interesantes:
- Bajo mantenimiento.
La principal ventaja que tiene el césped artificial es que te ahorras todo el trabajo que implica cuidar un césped natural. No debes abonar la tierra, ni rociarla con pesticidas y fertilizantes, ni instalar un sistema de riego. Lo instalas y, en lo fundamental, te olvidas de él. Lo que sí debes es limpiarlo y desinfectarlo cada 3 o 4 meses para evitar que concentre bacterias.
- Buena calidad.
Como sucede con otros productos y materiales de bricolaje, en el césped artificial encuentras diferentes calidades y acabados. Cuanto más calidad tenga el césped artificial que vas a colocar, más se parece a la hierba natural. Los fabricantes se esmeran en cuidar la altura de la hoja, su textura, su tacto, el color, etc. para ofrecer una experiencia única al usuario.
- Adecuado para nuestras mascotas.
Si tienes una casa con jardín y un perro, y te decides a instalar césped natural, en el momento más imprevisto, el perro se dedicará a escarbar en el suelo y te desgraciará el césped. Es inevitable. Forma parte de su naturaleza. Si colocas césped artificial, esto no va a suceder. Se topará con un suelo de plástico, y no de tierra.
Los céspedes artificiales están fabricados con materiales que no resultan tóxicos para nuestras mascotas. Podrán moverse libremente sobre él y encontrar una superficie suave y acolchada en el que tumbarse. Eso sí, será inevitable que sobre el césped depositen pelos y babas, por lo que si queremos mantenerlo impoluto, deberemos extremar su limpieza.
- Siempre impecable.
Si colocas césped natural, nunca lo vas a tener en perfectas condiciones, por mucho que te esmeres en cuidarlo. En las temporadas en las que hace mucho sol es normal que algunas hojas se sequen y se vuelvan marrones. Por mucho que lo cuidemos, crecerán malas hierbas y nos aparecerán claros en los que el césped ha dejado de crecer.
Esto no sucede con el césped artificial, que mantiene su verde intenso durante todo el año. Su pigmentación es resistente a los rayos Ultravioleta, lo que hace que no se decoloren por la luz del sol.
- Alta duración.
Un césped artificial puede durarte perfectamente entre 10 y 15 años. Todo esto sin tener que estar encima de él. Es más resistente que el césped natural, que se encuentra expuesto a la luz solar directa.
- Un producto ecológico.
Aunque el césped artificial está fabricado con plástico, es un producto ecológico y respetuoso con el medio ambiente, lo mires como lo mires. En el momento en el que lo retires, debes saber que es 100% reciclable. Muchos fabricantes, para producirlo, emplean un alto porcentaje de plástico reciclado.
Por otro lado, proteges el medio ambiente y haces un uso más responsable de los recursos naturales. Para su mantenimiento no emplearás productos químicos como fertilizantes y pesticidas que contaminan los acuíferos, y ahorrarás una gran cantidad de agua, ya que no la necesitas para conservar el césped.
Inconvenientes.
No vamos a ser fariseos y afirmar que el césped artificial es la octava maravilla del mundo. Evidentemente, presenta inconvenientes respecto al césped natural. Estos son algunos de los aspectos a destacar:
- Es un producto sintético.
Por mucho que se mejoren las calidades, el césped artificial no va a airear el suelo ni va a liberar oxígeno durante su crecimiento, como sucede con el césped natural. Aunque se ha mejorado mucho el tacto de los materiales, tampoco vas a sentir esa sensación refrescante que se experimenta cuando andas descalzo sobre la hierba. Al contrario, el césped artificial retiene bastante el calor en las horas más soleadas del día. Al final, estás caminando sobre una alfombra de plástico y esa diferencia se aprecia si lo comparas con la hierba natural.
- Coste de instalación.
El césped artificial tiene un alto coste de instalación inicial. Cuanto mejor sea el césped que queremos colocar, mayor calidad tenga y más realista parezca, más caro sale el metro cuadrado. Sin embargo, por todas las ventajas que hemos visto antes, debemos entenderlo como una inversión a largo plazo. Por su durabilidad y su bajo mantenimiento, imagínate el dinero que te vas a ahorrar en abonos, en agua, en comprar una máquina para cortar el césped, en contratar a un jardinero para que te lo cuide. Y por supuesto en tiempo. A no ser que la jardinería sea tu hobby, el césped lo instalas para disfrutarlo y no para cuidarlo.
- Instalación compleja.
No vamos a decir que para colocar césped artificial tienes que ser un ingeniero, pero si debes ser cuidadoso para conseguir un resultado óptimo del que te sientas orgulloso.
El césped artificial se coloca de forma rápida, pero hablando con algunos expertos en bricolaje, todos señalan que su principal complicación radica en la instalación.
Cómo se instala.
Como hemos visto, el césped artificial se puede colocar sobre diferentes superficies. Vamos a empezar por abordar su instalación sobre terrazo o cemento, en una terraza o un patio, que es más sencillo. De esta forma veremos las pautas generales para su colocación.
En primer lugar, hay que preparar bien el terreno. Limpiar bien el suelo con agua a presión y esperar que se seque. Después desenrollaremos los rollos de césped artificial, asentándolo sobre el suelo para evitar que se produzcan huecos y pliegues.
Debes cortar con un cúter el césped a ras de la pared y eliminar las imperfecciones de los laterales para conseguir un encaje natural entre las tiras. Coloca todas las tiras en la misma dirección. Con la inclinación de la hierba mirando hacia ti. De esta forma lograrás una apariencia más natural. Deja en el perímetro un sobrante de 8 a 10 centímetros, que finalmente recortaremos para obtener un encaje perfecto.
Para fijar el césped podemos hacerlo con tiras adhesivas de doble cara o utilizando un pegamento especial de poliuretano bi-componente. En ambos casos, levantaremos los bordes de las tiras unos 20 centímetros y los doblaremos sobre sí. Posteriormente, colocaremos la tira adhesiva y aplicaremos la cola, si fuera necesario. En la pega del perímetro, respeta el sobrante de seguridad. Presiona el césped contra el suelo y cuando esté bien seco, recórtalo.
Cuando tengas instalado el césped, rocíalo con arena de sílice. Mejora el agarre, contribuye a que las fibras mantengan su postura, mantiene la humedad y larga la vida de la alfombra. Esparce la arena por todo el césped, peinándola con un rastrillo y dale un manguerazo final para asentarla.
Si colocamos el césped artificial sobre la tierra de un jardín, el blog de Leroy Merlín señala que tenemos que seguir algunos pasos adicionales.
En primer lugar, debamos arrancar todas las malas hierbas que haya en el terreno. Después debamos alisarlo ayudándonos de un rodillo. Para fijar el césped sobre la tierra es aconsejable hacerlo mediante bandas autoadhesivas. Sobre las uniones colocaremos sacos de arena, que presionen el césped contra la tierra y las mantendremos durante 24 horas. El resto de pasos son los mismos que si lo instaláramos sobre terrazo.
Con el césped artificial lograremos darle un aire más acogedor a las zonas exteriores de nuestra casa.