Cuando empieza a refrescar puedes hacer el cambio de armario para lucir tus botas preferidas o tu chaqueta de pelo. Es importante renovar el armario cuando no se dispone de espacio suficiente para guardar toda tu ropa.
Los expertos explican que es importante el espacio para que las prendas se mantengan mejor preservadas y para que identifiques más fácilmente la ropa que tienes.
Debes hacer el cambio de armario aunque dispongas de espacio, porque la ropa que no nos vamos a poner durante varios meses coge polvo. El mejor momento para renovar el vestidor es cuando cambian las temperaturas.
En la actualidad no hay fechas exactas, ya que podemos estar en noviembre con manga corta todavía. Es aconsejable dejar algunas prendas ligeras porque el calor veraniego no se va en muchas zonas de España.
Las prendas que nos sirven para los 12 meses del año son las camisetas básicas de manga corta, camisas de popelín, pantalones de algodón tipo sastre, denim, jerséis o cárdigan de punto ligeros. ¡Estas prendas no pueden salir del armario!
Y los complementos que puedes usar siempre son las bailarinas, un bolso de piel o unas deportivas. Para comenzar el cambio de armario debes vaciarlo para limpiarlo a fondo y para poder ajustar la estructura interior.
En verano solemos usar más prendas colgadas y en invierno más dobladas. Para quitar el polvo pasa la aspiradora y un paño de microfibra húmedo, después seca todo.
En ese momento cambia el ambientador del armario y escoge una fragancia más cálida. También puede utilizar bolsitas de tela con hierbas secas o bolsas de té.
No te olvides de limpiar las puertas del armario por dentro y por fuera. Para evitar los hongos y manchas abre los armarios, para que se ventilen durante 10 minutos una vez a la semana.
Si tu armario tiene puertas de espejo límpialas con un producto específico para cristales y para secarlas usa una gamuza que no suelte pelo.
Después de vaciar y limpiar a fondo el vestidor, guarda las prendas de la temporada. Y es muy importante que todas las piezas estén limpias, sin descosidos y con todos los botones.
Apuesta por las perchas resistentes y antideslizantes. Para conseguir armonía estética las perchas deben ser del mismo estilo y opta por colores suaves.
«Intenta poner solo una prenda por percha aunque no tengas mucho espacio. Si no ves una prenda es como si no la tuvieras. Además, la ropa colgada se conserva mejor que doblada», explica el diario El Mundo.
Te aconsejamos que cuentes con iluminación dentro de tu armario. Para ello, usa tiras de luz con batería recargable o con funcionamiento a pilas. Se colocan dentro del ropero e incorporan un sensor de movimiento que se activa al abrir las puertas del armario.
Lo ideal es que hagas el cambio de armario en un par de días como máximo. En esos días puedes donar lo que esté en buen estado y tirar las prendas rotas.
“Existe una regla muy básica y sencilla que consiste en descartar todo aquello que llevas más de un año sin usar”, explica la estilista Francesca García-Miró.
La experta recomienda “pensar que todo lo que dejamos ir da lugar a que lleguen nuevas y mejores cosas y que esto de lo que te desprendes puede servirle a otros también. Yo sigo la metodología DANSHARI: dan = rechazar las cosas innecesarias, sha = deshacerse de las cosas inútiles que uno posee, ri = detectar el deseo insano por las cosas innecesarias. Nos enseña a deshacernos de todo aquello que no es útil en nuestra vida y que no nos aporta nada esencial: desde la ropa que nos sobra en los armarios hasta esa relación que vamos arrastrando por costumbre, pero que no nos llena».
Guarda las prendas de la estación pasada en cajas de cartón, ya que este material sirve para embalar, empaquetar y guardar objetos. Los profesionales del Grupo Mimó explican que las cajas de cartón son fáciles de cargar y apilar. Además, es un material más ligero que el plástico, la madera o el metal.
Puedes encontrar el cartón de diversas formas, tamaños y diseños. Además, es uno de los materiales más económicos y reutilizables.
En esas cajas puedes guardar zapatos, abrigos, accesorios, etc.
Si etiquetas las cajas sabrás qué contienen, así que opta por las letras o dibujos. Las marcas apuestan por el papel y el cartón como alternativa al plástico.
La industria del cartón es una de las más sostenibles del mundo. Una caja de cartón corrugado se compone aproximadamente de un 50% de material reciclado. Otra de las ventajas es que estas cajas son desmontables y ocupan poco espacio
